Dejó de ser una cuestión de límites difusos o un debate por aproximación para rechazar actividades extractivas en áreas estratégicas. Siete años después de la promulgación de la ley de glaciares (26.639), que dispone la creación del Inventario Nacional de Glaciares (ING), la Argentina puede ahora certificar, con validación científica, que atesora al menos 15.691 glaciares a lo largo de la cordillera de los Andes y que es el segundo país de América del Sur, después de Chile, entre los de mayores reservas estratégicas de agua dulce en estado sólido.