Lorena Cardín – Guillermo Gallo Mendoza
Desde los tiempos de la conquista y colonización, los Toba Qom fueron sometidos mediante procesos de aculturación que incluían la pérdida de soberanía y seguridad alimenticia. Esto conllevó la imposición de trabajar como mano de obra asalariada y sin protección social provincial ni nacional. En la actualidad, la coyuntura no es mucho más favorable. Al no disponer de superficies suficientes, ni contar con los insumos necesarios para la producción de las parcelas disponibles, su subsistencia depende, en gran medida, de la obtención de planes sociales del Estado.